El
pago de efectivo a los accionistas como retribución a su inversión se conoce
como dividendos en efectivo. Los dividendos
sólo pueden ser declarados por la asamblea de accionistas, la cual tiene
autoridad para ordenar el pago de un dividendo. Si la asamblea decide declarar
un dividendo, se deben tomar las medidas para que se pague a los
accionistas en determinada fecha.
Tres fechas son importantes para el proceso de otorgamiento de dividendos:
1.- Fecha de declaración: en la que la asamblea de accionistas declara el dividendos.
2. Fecha de registro: los accionistas que en una fecha determinada poseen acciones tienen derecho a recibir el dividendo.
3. Fecha de pago: en la que se envían por correo a los accionistas los cheques o transferencias bancarias de los dividendos.
Los dividendos también pueden pagarse con acciones de la entidad.
Cuando
los accionistas decidan utilizar parte de las utilidades retenidas para
aumentar el importe del capital social mediante la distribución de un dividendo
en acciones, éste debe quedar reflejado como una disminución en las cuentas de
utilidades retenidas y un incremento en la cuenta de capital suscrito y pagado.
El importe
transferido normalmente es el valor razonable (el precio de mercado) de las
acciones emitidas para el dividendo en capital.